Hace un año en la esquina porteña de Santa Fe y Coronel Diaz, nos juntamos a tomar un cafe.
Era sabado, el dia un poco nublado, si recuerdo que hacia calor, pues dentro de la confiteria el aire acondicionado estaba a pleno y a mi me dio frio.
Un cafe puede durar 15 minutos, una hora o toda una vida.
Este cafe que saboreamos hace un año aun tiene el sabor de recien cosechado, intenso, fuerte, agradable, con mucho amor, pues las dos personas que lo cosecharon le punen dia a dia toda la garra, todo el amor, y toda la fuerza que encuentran que les sale, que les nace.
Gracias amor, por hacer de mi vida, una vida hermosa, una vida llena de comprension, llena de amor, llena de sueños por vivir.
Junto a ti estoy y estare siempre.